Cuando viajas al extranjero, no siempre puedes disfrutar de tus contenidos favoritos (programas y series de televisión, películas, música…). Y es que muchos de los servicios a los que estamos suscritos incorporan restricciones geográficas, algo que también puede suceder con la programación online de determinados canales de TV.

De esta forma, el catálogo de películas y series en streaming de plataformas como HBO o Netflix no es el mismo en todos los países. Por suerte, mediante una conexión VPN podemos falsear nuestra ubicación para acceder a todo sin restricciones.

Así, si estamos de viaje fuera de nuestro país de origen, podremos seguir accediendo a nuestros contenidos favoritos, estén o no bloqueados geográficamente. Un buen ejemplo son las retransmisiones deportivas, que varían notablemente en función de los derechos televisivos y de cada región.

¿Sabías que el precio que pagas por un vuelo o un hotel depende de la ciudad desde donde hagas la consulta? Por lo general, aquellos que buscan desde zonas más ricas puede que vean un precio más elevado, e incluso es posible que no puedan acceder a algunas ofertas o servicios (ya que solo están disponibles para clientes locales).

También sucede lo mismo con muchas tiendas online, que no permiten comprar determinados productos o que los venden a un precio sensiblemente mayor en función de la ciudad o país del cliente.

Con una conexión VPN, es sencillo cambiar de ubicación virtualmente e ir probando, hasta dar con el chollo que, de otra forma, nunca habríamos descubierto.